Hacía días que ya no escribía,pero eso espero que no vuelva a pasar. Después de Guadalajara, donde me vacié, he estado enfermo y con un largo viaje el fin de semana, por lo que mis entrenamientos han sufrido una drástica reducción. Para más inri, me han cerrado TODAS las piscinas de la ciudad, (lo que habla muy a las claras de la nefasta gestión deportiva del Ayuntamiento de mi ciudad), por lo que buscar un charco donde nadar es tarea poco menos que imposible.

Bueno, las cosas hay que tomarlas como vienen y no desesperar;lo cierto es que estas pasadas semanas eran cruciales, (por aquello del máximo acúmulo de trabajo), pero habrá que mantener la calma y , si es necesario, replantear mentalmente la carrera en Hawaii. Terminar sigue siendo el objetivo priorirario, lograr mi segunda camiseta de finisher.

En el lado positivo, (tremendamente positivo), el viaje del fin de semana. Un largo viaje conduciendo, 800 kms. de ida y otros tantos de vuelta hasta El Ferrol, donde competían mis discípulos triatletas más jóvenes en el Campeonato de España Junior y Cadete de Triatlon. No me importó pasarme el fin de semana en blanco, sin sumar kms. de entrenamiento en mi libreta, ya que ellos lo hicieron muy bien y siempre te sientes reflejado en su esfuerzo.

Los cadetes muy bien, (Fernando Alarza , a la derecha, el 15º y Andrés González el 30º)
Los juniors, chapeau, cuartos de España por equipos con Joaquín Alonso, (en el centro de la imagen, antes de la prueba, el 13º, bajándose a correr en el grupo de cabeza), Dani Arriero, a la derecha, el 23º y Andrés Aldana, a la izquierda, el 38º. Buenos chicos y grandes deportistas.

Esta semana intentaré agarrar fuerte de nuevo el timón.