Francisco Vacas, ultrafondista y Ironman, uno de mi discípulos del club Aguaverde, concluyó el pasado lunes el «Desafío Tecama», (Triatlon Extremo Cadaqués- Madrid),rebajando ampliamente el horario máximo que se habia autoimpuesto de 72 horas.

El reto consistió en comenzar con las prueba del Marnaton, (http://www.marnaton.com/), una prueba de natación de larga distancia de aproximamente 7 kms. , uniendo el Cabo de Creus con Cadaqués, para continuar con un «viaje» en bici hasta Madrid y una vez en la capital de España cubrir la distancia de un doble marathon, (84 kms.) bordeando por caminos y el anillo verde la capital.

Hace meses, cuando tanto Fran como Alex Izquierdo, (http://ironmck.com/es), me propusieron que los diseñara un plan para afrontar el reto, pensé en primera instancia que se habían vuelto locos, para, a renglón seguido, ponerme manos a la obra. Finalmente también estuvo en la salida el aventurero catalán Josef Ajram.

Pero en definitiva, solo Fran Vacas pudo completar el reto, pues sus compañeros, por una u otra razon tuvieron que desistir en el empeño.61h, 50′ despues de la salida en Cabo de Creus, Fran Vacas llegaba a la Puerta del Sol después de cubrir las siguientes distancias cada día:

Sábado:Marnatón cerca de 7 km nadando.Bici 310 km.

Domingo:Lerida-Area 103 Bici 408km.

Lunes:Area 103 -Madrid, Metro Canillejas 105 km.84.400 Carrera.

Sus impresiones , dos días después del reto:
Ya han pasado unos días del Desafío y mi estado de alerta no baja. Todavía me despierto a media noche pensando que me he dormido y que empezaré la etapa de bici, que me queda tarde y no podré conseguir el reto. Noto cómo se me acelera el pulso y empiezo a sudar cada vez que recuerdo los momentos vividos. Sigo obsesionado. Y es que este reto ha requerido muchas horas de trabajo, entrenando duro el cuerpo, fortaleciendo la mente y sobre todo espíritu, espíritu de superación cada día que pasaba, constancia, desde luego cabezonería y porque no decirlo mucha fe en mi mismo y dosis elevadas de coraje.

Cuesta recordar los momentos malos. Solo me llegan los buenos, tal vez sea porque son estos mayoría y ya habrá tiempo de contar todos con detenimiento, pero sobre todo me quedo con las sensaciones percibidas en estas casi 62 horas. Viento, Frío, Lluvia, Granizo, Calor son los cambios climatológicos que mi débil cuerpo ha podido sufrir en sus carnes, carnes que mermaron drásticamente; nunca me podía haber imaginado que mis piernas pareciesen las de un corredor normal y no dos columnas gruesas cómo suele ser habitual, que las mallas de correr que utilizo habitualmente se me fuesen cayendo toda la doble maratón y mis cuadriceps bailaran en ellas.

¿Porque alguien hace esto?,¿ que sentido tiene?,¿ que queremos demostrar?,¿ porque hacer algo más largo que un Ironman, un Ultraman?. Si todavía sois de los que os hacéis estas preguntas al enteraros de este reto, sólo puedo intentar explicároslo pero sinceramente, dudo que lo entendáis. Se llama PLACER, eso es lo que he sentido al montar junto a Alex este reto, placer al entrenarlo, placer al hacerlo y desde luego un gran placer al acabarlo. Las felicitaciones son muchas y variadas: algunas (cómo puede ser de conductor de autobús que me preguntó el otro día que me pasaba cuando me dirigía al trabajo) noto que son por compromiso pero que no alcanzan a ver que no es locura ni delirio es simplemente el estar vivo y vivir.

Os dejo una imagen de Fran corriendo en su última etapa y , ya al finalizar, junto a algunos compañeros de club que siguieron ya en Madrid sus últimos kms.

Enhorabuena, animal!!…y ahora a descansar.