Comienza el 4º mes de mi nueva vida en Gran Canaria. Cada jornada, un descubrimiento. He escogido un nuevo sendero para caminar y me he dado cuenta de que es duro y pedregoso. Voy explorándolo; pero por favor, no os inquietéis. Se que la primera parte de este sendero tiene rocas y piedras que me desestabilizan, es un tanto impracticable, sobre todo si lo miramos de lejos, escrutándolo. La lejanía también engaña. A medida que recorro el sendero, el despeñadero cambia a ligera pendiente, una subida interminable que recorrer asido a algunas manos amables.

 

Entre decenas de razones, vine para no seguir escuchando el eco de los ociosos insoportables, pero eso, tan solo el eco. No quise una paz regalada rodeado de ciertas gentes serviles y quise ser como la roca que se adentra en el mar, si, en el océano grancanario que me inspira, esa roca azotada durante siglos que no muestra traza alguna de violencia, así es mi parecer, mi sólida convicción.

 

Días atrás llegaron gentes de mi mundo anterior, ese mundo que sigue siendo mío, sin renuncias estúpidas, y pude compartir largas jornadas de trabajo al por mayor= entrenamiento. El aprendizaje aquí es continuo y el trabajo ingente, he llegado a recuperar mi ritmo de labor de hace tal vez una década, incluso con la misma ilusión y vigor; puedo ser yo mismo, aconsejando y guiando a otros tal vez, ó simplemente entrenando para mi, pero yo mismo en esencia. Sin duda es algo motivante.

 

Esperan meses, marzo abril y mayo, que me harán esforzarme hasta el límite y dar lo mejor de mi mismo. Seguiré escribiendo en este espacio, a veces antes, otras más tarde.

Zumo

Y en abril os espero a muchos de vosotros en el #EpicIron  http://www.pablocabeza.com/epic-iron-2015/